Nerviosos por la mañana llegaron los niños al colé.
En autobús nos acercamos a Cabezon de la Sal, donde nos llevo a la parada del tren. Cogimos el tren y nos llevo hasta Santander. En cada parada escuchamos el destino donde nos encontrábamos, fue muy divertido.
Llegamos a Santander vimos como es una estación de Feve.
Y de nuevo, otro bus nos acerco al Palacio de la Magdalena. Donde nos estaba esperando el bus Magdaleno. Visitamos todos los rincones de la zona y después visitamos a los animales que hay junto al mar: focas, leones marinos y patos.
Llego la hora de comer, y nos fuimos al pinar a comer en el campo. Y después nos fuimos a los columpios a jugar, que lo estaban deseando.
Fue una excursión muy divertida, regresamos a las 5 muy cansados pero mereció la pena.
Hasta la próxima excursión.
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